Una de las razones que convence a los creyentes del fenómeno extraterrestre es el tamaño del universo y la cantidad de exoplanetas en los que puede haber vida desarrollándose resultando en una civilización inteligente. Sin embargo, como aprendimos anteriormente con la Paradoja de Fermi, esta alternativa contrasta con la imposibilidad de lograr un contacto oficial con los aliens a nivel global.
Hasta el momento sólo podemos detenernos en algunos sucesos importantes para la ufología como abducciones famosas, el Caso Roswell, el misterio del Área 51 y los avistamientos de naves extrañas por parte de la marina norteamericana en el espacio aéreo de Estados Unidos. En ese contexto, no podemos hablar de un contacto oficial entre los aliens y algún gobierno terrestre.
¿Y si los aliens no quieren comunicarse?
Cabe preguntarse si los aliens por el momento no quieren comunicarse con la humanidad. La realidad es que el universo debe estar lleno de vida inteligente. El tamaño y las condiciones así están dadas porque existen ingredientes para la evolución de civilizaciones inteligentes en cada rincón del inmenso espacio exterior lo que nos lleva a una conjetura, bastante inverosímil, como todas esas ideas revolucionarias que dieron comienzo a algunos de los descubrimientos más significativos de la humanidad.
¿Qué tal si hay más de una civilización extraterrestre en el universo? No sólo eso. ¿Y si estos aliens están en comunicación entre ellos? Podría ser que llegado cierto punto de evolución una raza logra dominar distintas tecnologías, como el viaje interestelar, pero al mismo tiempo alcanza una madurez interior necesaria donde el conflicto bélico ya no es parte de su sociedad y logra la sensatez requerida para conocer a sus vecinos que la están esperando.
Podría existir una especie de federación alien donde todas estas civilizaciones conviven pacíficamente esperando la llegada de nuevas razas que hayan atravesado su evolución de manera satisfactoria para unirse a este conjunto de castas intergalácticas que están desarrolladas para compartir y vivir en armonía. ¡Algo para lo que todavía no estamos preparados en el planeta Tierra!
Si esta teoría alocada tiene algún sustento tendríamos que preguntarnos muchas cosas. Después de todo, los grandes avances tecnológicos de la humanidad siempre surgen gracias a las guerras y cuando una civilización humana encuentra a un grupo en inferioridad de condiciones la historia nos enseña que se llega, incluso, al genocidio, como fue el caso de los aborígenes en las américas con la llegada de los europeos. Los aliens probablemente estén esperando no sólo que avancemos desde la tecnología rudimentaria que existe hoy en el planeta sino que también aprendamos a respetarnos y respetar al prójimo.