AARO y su investigación sobre UAPs

La All-Domain Anomaly Resolution Office, mejor conocida en el mundo como AARO, es encabezada por el Dr. Sean Kirkpatrick y tiene a su cargo la investigación de los UAPs intentando determinar cuál es el origen de este fenómeno particular que está ganando trascendencia este último tiempo. Esta entidad gubernamental de Estados Unidos depende de la Office Under Secretary of Defense for Intelligence & Security que en el pasado se encargó de perseguir a aquellos que tuvieron la motivación de informar al público en general sobre la actividad ovni.

Hasta el momento el Pentágono no confirmó ni negó que AARO haya descubierto naves de otro mundo a las que se les estaría practicando ingeniería inversa para obtener tecnología avanzada producto de inteligencias no humanas, tal como declaró el ex miembro de la Fuerza Aérea y la inteligencia norteamericana David Grusch, que mediante su testimonio revolucionó a toda la ufología.

Susan Gough, portavoz del Departamento de Defensa de Estados Unidos, confirmó que AARO investigó programas denunciados por individuos que mencionaron estas temáticas en el marco de la revisión histórica del congreso aumentando las posibilidades de que miembros del equipo liderado por Kirkpatrick hayan encontrado material exótico de origen extraterrestre aunque esta información no le llegó al público en general.

Los miembros de AARO y la información

AARO tiene ciertas limitaciones ya que no puede acceder a información de operaciones encubiertas de agencias como la CIA, la National Reconnaissance Office, la National Geospatial-Intelligence Agency o la National Security Agency. Sin embargo, los miembros de la oficina encabezada por Kirkpatrick  pueden tener llegada a esta información si consiguen estándares de seguridad individual para estos temas.

AARO
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Susan Gough se refirió a esta cuestión y dejó en claro desde su perspectiva que AARO tiene a su disposición toda la información referente a UAPs incluso aquella que está clasificada por motivos de seguridad nacional o en posesión de determinadas organizaciones gubernamentales de inteligencia para las cuales el secretismo es una forma habitual de manejarse, más teniendo en cuenta que estamos hablando del fenómeno extraterrestre, que todavía permanece estigmatizado en este aspecto.