Los ovnis vienen siendo observados en nuestros cielos por lo menos desde la década de los 40. No obstante, las características de los avistamientos varían mucho desde aquellos tiempos con respecto a la actualidad y esto puede deberse a un mecanismo de adaptación que los objetos anómalos están teniendo respecto a nuestros avances tecnológicos o tal vez al hecho de que están siendo detectados por la gente y son conscientes de esta realidad aunque no los molesta.
En ese sentido hay una cuestión que no podemos obviar que es el número en ascenso de avistamientos de ovnis que se registra cada año que pasa. Claro, hoy todas las personas tienen en su poder dispositivos de grabación de alta definición gracias a los celulares de última generación. Además, los radares militares cuentan con mayor capacidad que en tiempos anteriores de la misma manera que aviones caza o barcos de guerra están capacitados para detectar objetos anómalos en sus cercanías.
Debemos tener en cuenta que los ovnis no parecen tener mucho interés en permanecer ocultos de la misma manera en que no ser detectados no los altera. Ambas opciones son aceptables para las inteligencias que controlan estos objetos de los cuales hasta el momento no sabemos su procedencia ni intenciones pero que desde la ufología sospechamos que no son una tecnología humana secreta como drones de última generación, sino que vienen de otro planeta u otra dimensión según distintas teorías aceptadas en esta disciplina.
Un estudio sobre los ovnis
Un estudio realizado sobre ovnis que abarca diferentes épocas advierte que en el período entre 1945 y 1960 estos intrusos eran vistos de día y a una larga distancia tanto por testigos militares como civiles. Luego pasaron a ser aproximaciones cercanas durante la noche y con público. También el reporte explica que desde la década del 60 a esta parte se han visto ocupantes de los objetos anómalos incluso con interacción con estos visitantes que demuestran tener una inteligencia a la altura del ser humano, incluso superior.
Los ovnis permanecen siendo un misterio, aunque hay versiones que señalan que Estados Unidos tiene en su poder objetos anómalos a los que se les practicó ingeniería inversa para desarrollar tecnología bélica superior y dominar el viaje intergaláctico como lo hacen estos visitantes. Hasta el momento estas versiones no pudieron ser comprobadas, pero legisladores norteamericanos están buscando la verdad mediante su influencia política y el testimonio de testigos como el ex oficial de inteligencia David Grusch que denunció estos programas.