Los ovnis son una realidad innegable a esta altura. Militares, políticos y científicos estadounidenses admitieron en el pasado que hay intrusiones en los cielos de ese país y muchas de ellas permanecen siendo un misterio. De esta forma queda claro que no conocemos la procedencia de estas anomalías ni sus verdaderas intenciones. Desde la ufología creemos que la Teoría Extraterrestre es una explicación válida para muchos de estos casos.
Pero explicar a los ovnis no alcanza. Debemos estar mejor preparados de lo que estamos en la actualidad en caso de que las inteligencias detrás de este fenómeno no vengan a la Tierra con buenas intenciones. Si bien muchos teorizan que los extraterrestres son tecnológicamente superiores a nosotros y si quisieran hacernos daño ya lo hubieran hecho, no debemos perder de vista la posibilidad de que no todos los integrantes de una especie inteligente pueden tener las mismas motivaciones y objetivos.
Existen dos alternativas en este sentido. La primera señala que la humanidad no tiene conocimiento de la tecnología extraterrestre y cómo funcionan los ovnis. Esto nos obligaría a forzar un salto tecnológico con pocas herramientas a nuestra disposición, aunque avances como la Inteligencia Artificial pueden ahorrarnos algunos pasos. La otra es que contratistas de defensa ya les hayan practicado ingeniería inversa a estos objetos desarrollando tecnologías desconocidas para el público en general como sugieren denuncias de personas con acceso a información clasificada.
Prepararnos para los ovnis
En cualquiera de los dos casos lo que debemos hacer es prepararnos para los ovnis que, según entendemos en Alien Detected, ya están entre nosotros. Una primera medida sería mejorar nuestros sistemas de detección especialmente a la altura de nuestras redes satelitales para saber cuándo y cómo algo ingresa en el planeta Tierra. Esa información es clave para un segundo punto en cuanto a nuestro trabajo de perfeccionamiento tecnológico como respuesta a la actividad extraterrestre.
La etapa siguiente es desarrollar tecnologías superiores en cuanto a la defensa tierra-aire de posiciones estratégicas para nuestras fuerzas militares, así como también equipar a nuestros aviones de guerra con mejor armamento y que estén preparados para incapacitar un objeto anómalo que pueda moverse a mayor velocidad y resistir más fuerzas G en una disputa aérea. Así es como el panorama de los ovnis sería diferente y podríamos acortar distancias respecto a ellos. No debemos olvidarnos de trabajar también en las flotas marítimas y los soldados que podrían llegar a tener que entrar en acción en caso de un conflicto con una civilización de otra parte del universo.