Hablar de ovnis cuando nos ajustamos al término real de la palabra es hacer referencia a un objeto que es visible en el cielo, pero del que no sabemos su naturaleza, origen, ni quien lo controla. No obstante, con el paso del tiempo la expresión ganó, a nuestro entender, otro significado, aquel referido a una nave de origen extraterrestre que puede ser controlada por seres inteligentes provenientes de otra parte del universo. En ese contexto, con el correr de los años se fueron sumando indicios de que el fenómeno es real obligando a que lo examinemos en detalle, tanto aquellos que somos entusiastas de estas cuestiones, como los escépticos que requieren más pruebas.
Este es el escenario al día de hoy donde la divulgación del fenómeno está ocurriendo a cuenta gotas, pero con pruebas que hace unos años hubieran sido producto de una película de Hollywood. Ahí están para que puedas ver los videos registrados por la Marina de Estados Unidos, conocidos como Nimitz, Go Fast y Gimbal donde aparecen extraños objetos realizando maniobras increíbles. Ahí está el testimonio de informantes como David Grusch que denunciaron programas de ingeniería inversa a ovnis y dijeron que agencias estadounidenses tienen material biológico extraterrestre.
Entonces podemos asegurar que el Fenómeno Ovni está en un momento único donde, como venimos diciendo hace tiempo en Alien Detected, políticos, científicos, militares y demás personas están aportando evidencias de ovnis que bien pueden ajustarse a esa segunda definición de la que escribimos en el primer párrafo de este artículo: naves extraterrestres que están atravesando los cielos y océanos del planeta Tierra sin que sepamos cuál es su intención.
Los que saben de ovnis
Hay sectores del periodismo y la comunidad de inteligencia que tienen acceso a información sobre ovnis que todavía no llegó a la opinión pública. De a poco, gente como Jeremy Corbell, George Knapp o Ross Coulthart están aportando evidencias significativas de que el fenómeno es real, está ocurriendo, pero todavía no podemos darle una explicación definitiva si tenemos en cuenta que los entusiastas de la ufología manejan distintas alternativas: extraterrestres, humanos del futuro y seres inter dimensionales son los principales candidatos para la resolución del misterio.
¿Este es el mejor escenario para los poderosos que sí saben qué son los ovnis? Ciertamente no, porque hay gente con mucha capacidad y motivación cerca de pruebas que antes estaban ocultas en archivos físicos y digitales, vaya uno a saber en qué clase de oficina en un edificio gubernamental o algún contratista de defensa que utiliza tecnología desconocida para la famosa ingeniería inversa. Hay distintas estrategias para confundir a la opinión pública…
Primero crearon la Oficina de Resolución de Anomalías en Todos los Dominios (AARO) para investigar el tema, aunque las conclusiones siempre eran negacionistas. Ahora dicen que el Pentágono esparció rumores falsos sobre objetos voladores no identificados en la década del 80 para ocultar los aviones stealth. Estrategias no les van a faltar nunca porque recursos les sobran, lo que no podrán lograr es matar el interés de la comunidad ufológica en todas sus formas y capacidades. ¡Así es!