Primero tenemos que preguntarnos cuál es la verdad acerca de los ovnis y su procedencia. La respuesta puede cambiar el paradigma en el que vivimos actualmente además de terminar con la noción de que estamos solos en el universo. ¿Estamos convencidos de que los extraterrestres nos están visitando? Hasta el momento no hay pruebas definitivas pero ciertamente hay más de un caso que nos permite llevar nuestros esfuerzos en esa dirección. Aquella que busca una divulgación responsable sobre esta alternativa.
¿De dónde podrían venir los ovnis? La primera posibilidad es que sean naves que provienen de otro planeta y que han logrado dominar el viaje intergaláctico con una tecnología ampliamente superior a la nuestra. Pero también pueden estar llegando a nuestra realidad desde otra dimensión. O de otra línea temporal. Las posibilidades son más de una, motivo por el cual debemos permanecer atentos a este fenómeno.
La realidad indica que Estados Unidos tomó la posta en cuanto al esclarecimiento de estas cuestiones. En el Congreso de ese país, el senador Chuck Schumer, impulsó una Ley de Divulgación UAP para intentar explicar distintas cuestiones alrededor de los ovnis como por ejemplo su procedencia, quiénes los controlan y todo respecto a los programas de ingeniería inversa denunciados por distintos informantes como por ejemplo David Grusch. Un primer intento muy valorable que igualmente encuentra resistencia en la Cámara de Representantes.
La verdad sobre los ovnis está allá afuera
¿Podemos conocer la verdad sin entrar en pánico? La realidad es que si se confirmara que los ovnis son naves de origen extraterrestre que están visitando la Tierra muchas personas se asustarían. El Dr. Colm Kelleher ya advirtió en el pasado que estos intrusos tienen la capacidad de alterar la percepción de los seres humanos motivo por el cual estamos frente a un fenómeno de características muy engañosas. Resolver este misterio debería ser parte de la agenda de todos los gobiernos del mundo.
El camino hacia la verdad sobre los ovnis no es una línea recta. Hay personas, empresas e instituciones que no quieren que sepamos qué es lo que verdaderamente está ocurriendo en este sentido. Además, la propia gente que está luchando por la divulgación muchas veces encuentra puntos de conflicto entre sí misma. Por eso es importante una legislación además del aporte de los informantes sumados a científicos que le den claridad al asunto. Todo esto con una fuerte decisión política sobre la materia. Como ven, algo más complejo de lo que uno podría suponer en un principio. ¡Debemos tener paciencia!