Los osnis son objetos anómalos que tienen la capacidad de sumergirse en el agua llegando desde el aire a gran velocidad sin sufrir daño alguno con el impacto. Tal vez el caso mejor documentado sea el ocurrido en julio de 2019 cuando el USS Omaha grabó uno de estos aparatos desapareciendo en el océano. El video se filtró a los medios y redes sociales gracias al periodista de investigación Jeremy Corbell.
Tim Gallaudet, un contralmirante retirado de la marina de Estados Unidos, publicó un reporte en el que advirtió sobre la peligrosidad de los osnis y su actividad en las aguas de ese país. El ex oficial remarcó que las características de estos objetos permanecen inexplicables y que el hecho de que el Departamento de Defensa no levante banderas rojas al respecto es una señal de que el gobierno no comparte todo lo que sabe sobre esto.
El reporte de Gallaudet sostiene: “Pilotos, observadores creíbles e instrumentación militar calibrada registraron objetos que aceleran a gran velocidad y cruzan la interfaz aire-mar de maneras que no son posibles para nada hecho por humanos”. De esta forma el ex militar sugiere que otra clase de inteligencia puede estar detrás de la actividad de los osnis. ¿Extraterrestres?
Estudiar a los osnis
Gallaudet dice que los osnis desafían la física y al mismo tiempo son muy superiores en términos de ingeniería y materiales necesarios para crear este tipo de nave que podría revolucionar prácticamente todos los aspectos de la vida humana, desde el transporte aéreo y marítimo hasta la generación de energía y la agricultura. Este es el impacto que podría alcanzar la ingeniería inversa practicada a uno de estos objetos.
“En algún momento en el futuro el gobierno podría comenzar a investigar abiertamente los ovnis en mayor medida que el esfuerzo de categorización superficial que se está llevando a cabo desde AARO. Cuando esto ocurra, la exploración posterior de los osnis tendrá el beneficio de realizar también nuevos descubrimientos en ciencias oceánicas”, remarca el informe.