Operación Highjump y ovnis

La Operación Highjump o Programa de Desarrollos Antárticos de la Armada de los Estados Unidos se realizó entre 1946 y 1947 consistiendo en maniobras militares que teóricamente buscaban probar equipos y tropas en las duras condiciones de ese terreno congelado. El organizador fue el contraalmirante Richard E. Byrd y se trató de la mayor fuerza militar expedicionaria que Norteamérica haya enviado a la región.

Operación Highjump
Ovni estrellándose en la nieve (IA Bing)

La taskforce de la Operación Highjump incluía 13 barcos, 4700 hombres y numerosos aeroplanos. Los ejercicios iban a durar entre 6 y 8 meses con un grupo limitado de científicos civiles entre los que se destacaba el geógrafo Paul Siple. La magnitud de esta expedición llevo a ciertos sectores a sospechar sobre las verdaderas intenciones de estos esfuerzos mancomunados.

La Operación Highjump podría haber estado vinculada con la expedición antártica alemana realizada en 1938 que muchos asocian con los Ovnis Nazis. Recordemos que Adolf Hitler estaba obsesionado con cuestiones paranormales entre las que se encontraban los extraterrestres y la posibilidad de acceder mediante ellos a una tecnología superior que le permitiera ganar la Segunda Guerra Mundial.

Operación Highjump y Nazis

Asimismo, autores como Ladislao Szabo, Michael X. Barton y Ernst Zündel advirtieron que la Operación Highjump pudo haber sido una ofensiva militar contra una base del Tercer Reich en la Antártida. Queda pendiente la pregunta: ¿Tendrán algo que ver los ovnis? La teoría de la conspiración ciertamente está del lado de la versión que incluye objetos anómalos en esta historia.

Los nazis son famosos por haber buscado elementos como el Santo Grial, el Arca de la Alianza, la Lanza de Longino además de estudiar todo lo que tuviera que ver con el fenómeno ovni. También desarrollaron “La Campana”, un extraño objeto del que no se sabe su verdadera función pero hay teorías que dicen que era una potencial máquina del tiempo con tecnología extraterrestre. Todos estos esfuerzos bien podrían haber sido llevados adelante en una base en la Antártida hasta ser descubiertos por una misión sin precedentes: la Operación Highjump. ¿Qué tal?