Los misteriosos OSNIS

Gentileza diario Crónica suplemento “Fenómenos Paranormales”. Autor: Carlos Parodi, periodista y escritor (Instagram CarlosParodi.64).

Más allá de las creencias míticas y de las complejas formulaciones astrofísicas, la controversial casuística del fenómeno OVNI alcanza niveles multifacéticos en cuanto a su variedad y presunto origen. Vinculados a los más antiguos indicios de naves voladoras que se han registrado en todos los cielos del planeta, la variante OSNI (Objeto Sumergible No Identificado) también nos remite a los primeros y fantásticos relatos urdidos por el imaginario colectivo.

Lo cierto es que en muchas crónicas y tradiciones legendarias la mención de objetos voladores que contaban con la inteligencia suficiente como para emerger y sumergirse “a voluntad” en la profundidad de las aguas, fueron mutando en el marco de los primeros estudios astronómicos que se desvelaban por explicar su enigmática naturaleza. En tal sentido, muchos investigadores marítimos han rescatado de archivos pertenecientes a la historia de la navegación, aquellos primeros textos escritos en los cuadernos de bitácora acerca de estos fenómenos tan volátiles como sumergibles.

OSNIS
OSNI en el océano (Grok)

Un antiguo registro proviene de finales del siglo XIX. Refiere al buque de guerra “Vulcano” y a su capitán, quien observó el desplazamiento de “objetos de colores luminosos” que de repente emergían del fondo del mar y rodeaban al buque, entrando y saliendo de las aguas e incluso pasando por debajo de la embarcación. Según los cuadernos de a bordo, este hecho sucedió el 15 de mayo de 1897 y acaso represente la primera mención oficial de un OSNI en los mares del mundo. De acuerdo con el informe certificado por su capitán: “Esas luces redondas y de colores se desplazaban rápidamente sobre la superficie, rodearon nuestro buque y se sumergieron hasta una profundidad que no estoy en condiciones de determinar”.

Muchos años después, en España, durante la década del 70, existieron infinidad de relatos vinculados a la aparición de OSNIS en las costas de Canarias, Tenerife y Las Palmas. Diversos testimonios de pescadores dieron cuenta de la aparición diurna y nocturna de estos objetos, llegando a señalar que irrumpían de golpe, causando un feroz oleaje y no pocos sobresaltos a los marinos. El creador de la Ufología en España y también destacado submarinista  Antonio Ribera (1920-2001) dejó reflejado en su obra “Los Doce Triángulos de la Muerte” abundante casuística vinculada a los OSNI. En forma paralela junto a las voces de los aterrados testigos, surgieron las explicaciones “clasificadas” de los altos mandos de la Marina y Ejército español, desmintiendo cada uno de los sucesos que asombraban a la opinión pública por aquellos años de desconcertantes olas platillistas.

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Gente viendo un OSNI (Grok)

OSNIS en los mares del Sud

En 1954 el investigador Renato Vesco señaló en una publicación de la Fuerza Aérea: “La Argentina disfruta del llamativo privilegio de constituir un blanco permanente para el sostenido espionaje de los platos voladores en nuestro planeta”. En la misma revista, su autor señalaba que en las tres ramas de las Fuerzas Armadas se habían conformado comisiones para evaluar la presencia de esos objetos en nuestro territorio, pero también aclaraba de antemano que las conclusiones a las cuales arribarían iban a permanecer bajo el aplomado sello del Top Secret.

La mención de diversos OSNIS en los mares argentinos surgió a comienzos de los 60 en la zona de Puerto Belgrano, Ingeniero White (uno de los puertos argentinos de mayor calado) y en la bahía de Camarones, en Chubut.  Por aquellos años muchos pescadores y turistas ocasionales que paseaban por muelles y escolleras, alcanzaban a vislumbrar la aparición de OSNIS que también “paseaban” por encima de las olas, para luego volver a sumergirse. Uno de aquellos privilegiados testigos resultó ser uno de los investigadores argentinos más respetados en el ámbito de la Ufología, Mario Coen, fallecido en 2021.

De igual modo sucedió con la experiencia vivida por el capitán de Fragata Omar Roque Pagani quien mientras estaba embarcado muy cerca del puerto de Mar del Plata junto con otros testigos, observó durante una noche muy calma de enero de 1967 cómo un OSNI a una distancia no mayor a cien metros, emergió delante de su embarcación y dotado de increíble propulsión “dirigida”, sobrevoló el mar con intensa luminosidad para luego volver a perderse entre la profundidad de las aguas…   

OSNIS en la Patagonia

En agosto de 2023 en el Golfo San Matías, los marinos de un buque mercante aseguraron que ocho luces anaranjadas emergieron del mar y se asemejaban a bengalas que se desplazaron en múltiples direcciones.

El padre Segundo Reyna y los “Platos Submarinos”

Los episodios de sintonía ufológica que acaecieron en Argentina a mediados de los años sesenta, despertaron el interés de científicos, militares y también de religiosos. Tal fue el caso del renombrado Padre Jesuita Segundo B. Reyna, quien fuera director del Observatorio “Adhara” ubicado en San Miguel, provincia de Buenos Aires. Durante 1967 en una disertación en la ciudad de La Plata relató el caso que vivió la embarcación bautizada “El Naviero”. Se trataba de la inoportuna “visita” recibida por un sorprendido mercante argentino en cercanías de la localidad brasileña de Santa Marta Grande, mientras navegaba a 17 nudos horarios.

OSNIS
Luz misteriosa bajo el agua (Grok)

El Padre Reyna recordó que “El Naviero” había sido construido en la época de la Segunda Guerra Mundial y diseñado especialmente para eludir a los submarinos. Al respecto también señaló que el capitán de la embarcación le había expresado que el formidable objeto luminoso que había visibilizado sobre las aguas, se deslizó cerca de su barco a una increíble velocidad de 25 nudos y se alejó en rápida maniobra, hasta perderse finalmente en la brumosa inmensidad del horizonte y dejando una colorida fosforescencia sobre las aguas…