Los Enigmas del Uritorco

Gentileza diario Crónica suplemento “Fenómenos Paranormales”. Autor: Carlos Parodi, periodista y escritor (Instagram CarlosParodi.64).

El cerro: Desde espíritus aborígenes hasta la desconcertante Huella del Pajarillo.

Una errante cadencia de sucesos anómalos sobrevuela por los desfiladeros, pastizales y penumbras rocosas del cerro Uritorco, el de mayor altura de ese majestuoso cordón montañoso de las Sierras Chicas en la provincia de Córdoba.

Uritorco
Cerro Uritorco (Diario Crónica)

Porque en esa región, mientras los mitos ancestrales preservan un significado oculto que parece destinado a conformar un criptograma complejo de descifrar, también las fuentes consultadas in situ, hablan de un entramado de concepciones sincréticas y de cosmovisiones interplanetarias. A fines del siglo XVI, con la llegada de los invasores procedentes de la Corona española, esas tierras eran habitadas por diversas etnias como los sanavirones.

Y fueron los “conquistadores” europeos quienes utilizaron la despectiva denominación “comechingón” para definir un punto geográfico que identificara a esas tribus nómades que habitaban en las grutas y oscuras cavernas de esa cadena rocosa.

Luces fluctuantes

Imbuido también de una inquietante raigambre esotérica, una multiplicidad de mixturas confluyen en derredor del llamado “Cerro Macho”. A pocos kilómetros de ahí, acaso la masacre perpetrada por los españoles contra la comunidad originaria en las alturas del cerro Champaquí de Ongamira, haya dejado una sangrienta y macabra aureola que envuelve a quienes transitan por ese territorio.

Los primeros estudios antropológicos y arqueológicos coinciden en señalar que ante la llegada de los españoles la población de comechingones superaba los treinta mil habitantes. Practicaban la agricultura y rendían culto a sus muertos, en pos de una vida ultra terrenal de esencia espiritual. Precisamente esas evanescentes energías fluctuantes en formas de luces que atraviesan los cerros, representaron para los investigadores metafísicos uno de los tantos misterios que acaecieron en esta región.

Entre creencias herméticas, ovnis y Erks

Pero también para muchos, un mundo invisible (y a veces visible) sobrevuela alrededor y por debajo del sagrado Cerro Uritorco. Algunos estudiosos han recreado historias vinculadas a una cosmovisión que dispara aristas tan exorbitantes como fantásticas.

Muchas de estas observaciones están planteadas por teorías que escapan a la ciencia y que apelan a esquemas de creencias herméticas y al misticismo, ya que se presentan como un conjunto de enunciados polifacéticos que generan una miríada de versiones no menos polémicas. El jurista y antropólogo argentino Guillermo Alfredo Terrera (1922-1998) dedicó gran parte de su vida a indagar acerca de los misterios que rodeaban a ese mítico cerro.

En uno de sus libros, “El Valle de los Espíritus”, señaló que las luces que podían observarse durante las noches eran sutiles formas de energía que representaban a espíritus de los comechingones. También creía en la existencia de ciudades subterráneas alrededor del planeta.

En ese sentido, Terrera afirmaba que la mítica ERKS estaba habitada por entidades cósmicas y subdividida por tres espejos dimensionales mediante los cuales sus “maestros ascendidos” se comunicaban con otras ciudades intra terrenas y también con aquellas naves que sobrevuelan los cielos nocturnos de Capilla del Monte.

Interrogantes acerca de la famosa “huella”

Un antes y un después en la casuística OVNI vernácula representó la noche del 9 de enero de 1986 cuando una gigantesca huella de forma ovoide apareció de la noche a la mañana en una ladera del cerro “El Pajarillo”.
Ubicada en la soledad del imponente cerro, la vivienda de la familia Gómez asentada en esa solitaria zona desde el año 1926, fue el escenario del enigmático hecho.

Ante el suceso, la confrontación de los relatos orales por un lado y el análisis de los investigadores por otro, continuó durante años y ocupó con disímiles miradas los titulares de los medios de comunicación.

Información clave para subir

Algunos turistas acceden solo por el desafío de alcanzar la cumbre, y otros por los enigmas que lo rodean.
Desde su cumbre se tiene una vista espectacular de Capilla del Monte, dique El Cajón y si el clima lo permite de las Salinas Grandes de Córdoba.

Al comenzar el recorrido se debe abonar un registro de ingreso. Durante la subida inicial hay diferentes postas para descansar: La posta del silencio, hondonada del buey, quebrada del viento, valle de los espíritus, entre otros. También es posible realizar otros senderos cercanos de baja dificultad y/o de larga distancia.

Investigación: “Seguime Chango, seguime”

A fines de los años ‘80 y años ‘90, el periodista José de Zer de Nuevediario trabajaba como movilero. Cubrió en el cerro Uritorco unos supuestos casos de OVNIs que acreditaban varios testigos.

Uritorco
José de Zer (Internet)

Sus notas, en compañía del camarógrafo Carlos “Chango” Torres, fueron tan exitosas que se extendieron durante seis meses, período en el que ambos vivieron en el cerro, examinando cuevas, subiendo en mulas y filmando estrellas -o algo más- en el cielo de Córdoba.

Aquí fue donde se popularizó la frase “¡Seguime, Chango seguime!”. Sus trabajos de investigación atrajeron al turismo a la zona y las historias de extraterrestres en el Uritorco comenzaron a multiplicarse.