Todos conocemos los detalles del Caso Roswell que tuvo lugar en 1947 cuando un plato volador se estrelló en un rancho de esa localidad norteamericana cambiando para siempre la vida de los testigos del hecho más paradigmático de la ufología moderna. Bueno, en Chile también hubo una situación similar que alteró a los vecinos de Paihuano.
El suceso en cuestión ocurrió el 7 de octubre de 1998 con la caída de un objeto del cual no hay todavía una definición oficial acerca de qué se trataba. Los habitantes de la comuna de Paihuano vivieron en carne propia lo mismo que la gente de Roswell a fines de los 40. La conclusión de muchos es que fue una nave extraterrestre la que se habría estrellado en el cerro Las Mollacas abriendo la polémica en Chile y Latinoamérica.
Los detalles de lo que ahora es conocido como el Roswell Chileno fueron aportados por los lugareños que dijeron cómo este extraño objeto se estrelló en la cumbre del cerro llegando a partirse en dos. A partir del evento algunas versiones aseguran que en el lugar se pudo ver en acción fuerzas militares de Estados Unidos y científicos de la NASA.
Un nuevo Roswell
Raúl Flores, vecino de Paihuano, señaló: “Yo pude ver el objeto en el cerro, era parecido a un disco metálico que reflejaba con el sol un brillo plateado y lo vi junto a otras personas. Yo estoy seguro de lo que vi. No eran brillo ni piedras ni nada parecido”. No obstante este testimonio, los carabineros que llegaron al lugar un día después dicen no haber encontrado evidencia alguna del siniestro.
Algunas explicaciones del Roswell Chileno son que podría haberse tratado de una “piedra pintada de blanco”. Otra posibilidad según el astrónomo Arturo Gómez es que haya sido un “bólido” que se desintegró antes de tocar el suelo. Por último, señalan que pudo ser un dron, pero la Dirección General de Aeronáutica Civil no advirtió esta clase de actividad aquel día de 1998. El misterio continúa y la explicación extraterrestre sigue siendo una alternativa que no fue erradicada.