Argentina le compró a Dinamarca 24 F-16 Fighting Falcon de los cuales 16 son monoplaza y 8 biplaza. Estas aeronaves son un refuerzo considerable para la defensa aérea de nuestro país. Asimismo, cuentan con funciones de combate aire-aire y aire-tierra por lo que bien pueden ser considerados cazas multipropósito. El acuerdo incluye la entrega de cuatro simuladores de vuelo, ocho motores y repuestos por cinco años.
Los F-16 tienen gran maniobrabilidad y se destacan en el contexto de una “dogfight”. Por eso en Alien Detected nos preguntamos si los pilotos de estas nuevas unidades tendrán instrucciones o protocolos a la hora de encontrarse con un ovni en el aire. Tenemos que pensar que gracias a esta compra, Argentina dio un salto de calidad en cuanto a la custodia de sus cielos y la probabilidad de detectar objetos anómalos se multiplicó exponencialmente.
Si bien un F-16 está lejos de las capacidades que tienen aviones más modernos como el F-22 o el F-35 su radar puede detectar objetivos en todas las condiciones climáticas y alcanzan una velocidad de 2500 kilómetros por hora. Su estructura soporta 9 G (nueve veces la fuerza de gravedad) y pueden volar más de 500 millas de manera autónoma. No obstante, todo esto parece poco frente a la posibilidad de cruzarse con una nave extraterrestre.
Protocolos para nuestros F-16
Lo cierto es que ahora Argentina está mejor preparada para defender su espacio aéreo y monitorearlo. Es en esta segunda cuestión que queremos detenernos. Los F-16 pueden llegar velozmente al encuentro de cualquier intruso. En ese contexto, ¿sabrán nuestros pilotos cómo reaccionar frente a un objeto anómalo? Hasta el momento no hay datos registrados sobre un enfrentamiento entre un avión caza y un ovni. Probablemente la orden sea perseguirlos y confirmar si son potenciales enemigos.
Un piloto de una línea aérea comercial no va a contarte si vio un ovni debido al estigma que acompaña al fenómeno. Así es como la ufología se pierde incontable cantidad de relatos que podrían arrojar luz sobre el tema. Respecto a los F-16 creemos que lo mismo va a ocurrir con sus tripulantes. Seguramente van a tener la instrucción escrita, hablada o tácita, de no contar sus experiencias con ovnis en caso de que ocurra alguna. Por lo menos esperamos que el protocolo frente a esta eventualidad sea efectivo.